Tenía pendiente leer Moby Dick. En su momento no lo hice, pero ahora me he puesto a ello. Y agradezco haber tardado. Porque ahora leo de otra forma: más despacio, fijándome en los detalles, sobre todo si, como es el caso, soy consciente de estar ante una de las obras gigantescas de la literatura.
Estoy leyendo Moby Dick en papel, pero acompañado de ChatGPT 4. Le pregunto cosas al "bicho" (todavía lo llamo así, «el bicho«) y me está resultando apasionante comprender y expandir algunos temas que aparecen en la novela.
Por ejemplo: lo de las ballenas, como diría Broncano.
Para empezar: ¿en qué momento de la historia cambió la percepción social de este animal? De ser considerado el mal (en el libro se refieren a las ballenas todo el tiempo como «leviatán» y otras denominaciones parecidas) a esa imagen que tenemos ahora de la ballena amiga, sonriente y afable. Mirad 👇🏻
Hay que entender que la caza de ballenas en el siglo XIX era una próspera industria. El aceite de ballena era fundamental en Europa ya desde un siglo antes como fuente de iluminación en lámparas y velas, así como para usos industriales como lubricante en maquinaria y motores. El alumbrado público de toda Europa dependía del aceite, sobre todo de aceite de ballena, hasta la llegada del petróleo.
Un inciso: leí en algún sitio (no sé si es cierto) que en España las calles olían mejor de noche que en el resto de Europa, porque para el alumbrado público se utilizaba aceite de oliva, que no olía mal como el aceite de ballena. Insisto, no sé si es verdad esto, pero me gustaría pensar que sí por lo idílico de la imagen.
Os cuento otra curiosidad que he aprendido en la lectura de Moby Dick. Aunque en el libro aparece una y otra vez el «esperma» de la ballena, su significado es diferente al evidente. «esperma» o «spermaceti» es una sustancia cerosa que se encuentra en la cabeza de las ballenas cachalote, un tipo de aceite de propiedades excepcionales, como una alta calidad para iluminar habitaciones y una textura que lo hacía ideal como lubricante o cosmético.
Porque de las ballenas, como del cerdo, se aprovechaba todo. Además del aceite, la carne era comestible y apreciada en algunas culturas; también las barbas se utilizaban en la fabricación de corsés, de cepillos para el pelo e, incluso, para arcos de violín. Los huesos y los dientes se empleaban como objetos decorativos y artesanos, y la piel para fabricar calzado o cinturones.
Y si la imagen de las ballenas ha cambiado, obviamente la de los balleneros también lo ha hecho. De hombres valientes, entregados, que pasaban su vida en el mar (la expedición del Pequod, el barco del capitán Ahab, tenía prevista una duración de al menos 3 años) a carniceros asesinos, cuyos buques son asaltados por Greenpeace para denunciar la sangrienta caza de ballenas.
En 1986 se decretó una moratoria para la caza comercial de ballenas, que sigue vigente. Se permite la, en teoría, caza científica, y algunos países como Japón, Noruega o Islandia aún cazan ballenas con fines científicos. La caza de ballenas con fines culturales o de subsistencia continúa también en algunas comunidades indígenas.
📽 Te recomiendo una serie
Machos alfa (Netflix)
Todo este tiempo me he resistido a ver esta serie, pero he de decir que la primera temporada me ha divertido y sorprendido a partes iguales.
Para ver sin complejos y con ánimo de reírse.
🈲 #palabrasquemolan
Obenques
Los obenques son cables o cuerdas gruesas utilizadas en la náutica para dar estabilidad a los mástiles de los barcos, especialmente veleros, evitando que se inclinen o caigan debido a la fuerza del viento en las velas o a movimientos bruscos del mar.
🍾 Chimpún
Para los más jóvenes, ya expliqué en su día que el título de mi libro de relatos, Échale la culpa a Milli Vanilli era un homenaje a un grupo de finales de los 80 y principios de los 90 que se vio envuelto en un escándalo memorable.
Esta semana se ha estrenado la película sobre el grupo, titulada como una de sus canciones más conocidas: "Girl You Know It's True". La película se centra en la versión de los hechos presentada por Fab Morvan, uno de los integrantes de Milli Vanilli (el otro integrante, Rob Pilatus, falleció en 1998), quien afirma que fueron engañados y estafados al firmar un contrato sin asesoramiento legal ni representante.
La película pinta muy bien. Mientras tanto, te propongo que consideres comprar el libro 😊.
Y hasta aquí Escribir para no odiar. ¡Nos leemos el próximo sábado!
«El odio es la cólera de los débiles».